miércoles, 2 de marzo de 2011

Sonrisas de algodón


En una ocasión oí comentar que pocas cosas marcan tanto a una persona como un paisaje que realmente se abre camino hasta su corazón. Aquellas primeras imágenes, el eco de las palabras en las que creemos, que nos acompañan toda la vida y esculpen un palacio en nuestra memoria al que, tarde o temprano, no importa cuántos lugares visitemos, cuantos mundos descubramos, cuanto aprendamos u olvidemos, siempre regresa. Nosotros hoy tenemos la luz de la mañana y el sol brilla de manera especial.



Varios de los principales argumentos de Bodegas Martúe son el sol, el viento, el agua, la luz… La intensidad de la luz y el sol dan vida y sabor a las uvas que se cultivan en este precioso jardín de 100 has. dedicadas a variedades autóctonas y foráneas, cuidadas con esmero y dedicación por una familia que nos hace disfrutar de la singularidad de este sobrecogedor paisaje y con un corazón que rezuma del cariño que caracteriza estos vinos.



Siempre existe una implicación, en una palabra, en la virtud de una persona, capaz de escuchar, de observar, de sentir simplemente, representando en mil y una forma de interpretar. Calidad humana que en mil y una palabras que no podría escribir, totalmente, tantos pensamientos de todo y sobre todo. A la virtud de poder escribirlo.

A Julián Rodríguez (Bodegas Martúe).



Los protagonistas de esta bonita cata son tres niños, Alisson, Daniel y Anay Belén. Gracias a Bodegas Martúe, que nos abrió sus puertas este domingo, y nuestro blog ha sido posible que ellos puedan disfrutar de zapatos nuevos, colchones donde dormir, material escolar, aseo, libros. Sus sonrisas serán el reflejo del sol, del viento, de la luz. A qué te recuerda y Bodegas Martúe os quieren invitar a viajar y para ello se necesitan de vuestros sentimientos, pues ellos serán el aire de vuestro vuelo.


Escucha la cata

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Vuestro blog parece una sucursal de children international

Anónimo dijo...

Un buen vino es como una buena película: dura un instante y te deja en la boca un sabor a gloria; es nuevo en cada sorbo y , como ocurre con las películas, nace y renace en cada saboreador.
(Federico Fellini)

Anónimo dijo...

Había probado algún vino de Martúe, pero no sabía que los hacían en un sitio tan espectacular. Enhorabuena por el blog.

Anónimo dijo...

A todo el equipo de a que te recuerda les hago llegar mis felicitaciones por tan excelente blog y por ayudar desinteresadamente a los que mas lo necesitan animo que su ayuda no es en vano, gracias a ella son un punete se superación para la niñez, una abrazo y mis mejores deseos.

Anónimo dijo...

El vino es como la vida para el hombre, siempre que se lo beba con moderación. ¿Qué es la vida cuando falta el vino? Porque él fue creado para alegría de los hombres.
Gozo del corazón y alegría del alma es el vino bebido a su tiempo y en la medida conveniente.
Eclesiástico 31, 27-28

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