martes, 28 de diciembre de 2010

Feliz Año Nuevo 2011


Termina el 2010 y dejamos atrás un año importante para todo el equipo de A qué te recuerda, el año que nos ha visto nacer. Han sido meses intensos de actividad con el vino, compartiendo aventuras, viajes y saboreando caldos de cualquier parte del planeta, sin olvidarnos de los que se hacen en nuestra tierra y que son la razón de ser de un blog que cada día apuesta por dar a conocer lo nuestro: los vinos de Castilla La Mancha. Vinos elegantes, con clase y magia.

Para brindar por el 2011 queremos recomendar a todos nuestros seguidores un vino espumoso, Gran Cueva, de Bodegas Verum, de Tomelloso, Ciudad Real (España). Está elaborado mediante el método "champanoise" de segunda fermentación en botella, y en él sólo se ha empleado mosto flor en búsqueda de la elegancia. Un vino que ha sido gestado en una cueva de 8000 metros cuadrados, una “Gran Cueva” en la que realizamos esta cata en compañía de familiares y amigos.

Todo el equipo de A qué te recuerda os deseamos un Feliz Año Nuevo y que en el 2011 se cumplan todos vuestros sueños. ¡¡Alcemos nuestras copas!! ¡¡Brindemos por el año nuevo!! ¡¡Salud!!!


Escucha la cata

jueves, 16 de diciembre de 2010

Bodegas Verum: La verdad del vino


Por fin llegó el momento de conocer la verdad, la verdad del vino, de la tierra castellano-manchega, de la uva y sus posibilidades. Llegó el momento de desplazarnos a una de las bodegas en un principio menos llamativas de cuantas hemos conocido hasta el momento para descubrir la verdad. Bodegas Verum juega un poco con nosotros a que siguamos creyendo la mayor mentira de cuantas se extienden por estas tierras: aquí, en Castilla-La Mancha, no se hace vino de calidad, aquí -se nos ha hecho creer desde siempre- nadie se preocupa por el vino; aquí la uva se recoge, se lleva a la bodega y se embotella el vino. Aquí, en Castilla-La Mancha, no hay nada más. Mentira. Un muro de mentiras levantado por nosotros mismos, los castellano-manchegos, con nuestra apatía por conocer y valorar lo que nos pertenece, un muro inconcebible que, curiosamente, no nos deja ver más acá y que Verum nos ayuda a derribar con una sola visita. No es necesaria una fachada llamativa, un entorno espectacular, cuando lo verdaderamente importante, espectacular y llamativo está dentro: en lo esencial.


Su enólogo, Elías López, conoce bien esa mentira y sabe que nos la creemos de verdad. Así, nos reciben, él y parte de su equipo (José Andrés Jiménez y Manuel Jiménez), con la serenidad de quienes tienen la certeza de que sus visitantes no van a salir de su bodega igual que entraron. Algo va a cambiar en ellos. Algo cambió en nosotros. Una idea. Nuestra idea sobre la forma de hacer vino, de cuidar y mimar la uva, pero también de exprimirla, explotarla para que dé de sí todo cuanto puede. Nos invitaron a probar vinos en rama, extraídos directamente del depósito, en uno de los mejores momentos, cuando están a punto de pasar a las barricas. Y poco a poco, como de la mano, conscientes de que nuestro asombro iba decididamente en aumento, nos dieron a conocer el mundo de la destilación, de los espirituosos, de lo, si cabe, todavía más desconocido, para terminar donde todo empieza: en las profundidades de la tierra, en una impresionante cueva de más de 8.000 metros cuadrados.


Lo verdaderamente importante, espectacular y llamativo está dentro: dentro de la uva, en las entrañas de la tierra, aquí, en nuestra tierra. Ahora sabemos la verdad.

sábado, 11 de diciembre de 2010

Primera cata de apadrinamiento



Un ángel en nuestro corazón. Ángel Bastián. Sus ojos son gotas del rocío de la mañana, un regalo en nuestras vidas. Su mirada pícara y chispeante irradia alegría y vida. Con sólo siete añitos juega con las estrellas, con las nubes, sueña con mil y una aventuras y, cuando abre sus brazos, es como si volara. Su sonrisa dulce y amable guarda alguna travesura. Es fruto del amor entregado de Andrea, su madre: una mujer fuerte que lucha por su vida. Por su vida, por la de Ángel Bastián, que rebosa esperanza, amigos del Mesón Octavio: Eloy, María Jesús, Paqui, José, Consuelo, Juan Carlos, Rosa, Juan Carlos, Mario, Vicente, Belén, Nacho, Prado, María José, Miguel Ángel, Fernando, Aurora y Belén, nos hemos unido. Unidos por una razón, por un sentimiento, por el futuro de un niño, por un mañana cargado de ilusión, porque merece una niñez feliz, por un juguete, por sanidad y educación, porque no hay nada más hermoso que la sonrisa de un niño, una bendición del cielo. Bodegas Castiblanque, de Campo de Criptana, abrió sus puertas y su corazón para ofrecernos una cata muy especial, una cata solidaria para reunir el dinero suficiente para apadrinar un niño: Ángel Bastián, de Valparaíso (Chile), es nuestro niño apadrinado. Gracias al corazón solidario de cda uno de vosotros, esta cata se ha hecho posible. No encontraría palabras para definir el esfuerzo de todos, las ganas de aprender y dar este bonito ejemplo. Miguel Ángel Castiblanque y María José Campos hicieron de nuestros guías por esta mágica bodega y, como sorpresa, nos ofrecieron una cata de vinos en rama, futuras promesas que nos brinda la añada 2010. Futuras promesas como Ángel Bastián. Al terminar la visita nos comprometimos a la continuidad, a la voluntad de seguir de cerca la vida de esos vinos, la vida de nuestro niño. Ángel Bastián será año tras año una razón más para visitar Bodegas Castiblanque y asegurarle un futuro regado de miles de sonrisas. Children International es la ONG encargada de tramitar y hacer llegar el dinero para velar por muchos niños que necesitan un presente y un futuro, porque no hay nada más sagrado que la felicidad de un niño.




Nuestro mensaje en estas fechas, en las que florecen la esperanza y la ilusión, es que queremos que escuchéis vuestro corazón, que miréis hacia atrás y recordéis vuestra niñez. Mirad por un momento la carita de ángel de Ángel Bastián, mirad sus ojos y pensad que por muy poco se puede hacer mucho. En navidad siempre aparece la sonrisa de Dios. Ojalá en vuestras vidas siempre fuese navidad. Gracias por vuestro ejemplo, porque la unión de amigos y un vino también puede ser solidaria.